sábado, 9 de marzo de 2013

LAS VOCES DEL SÁHARA

El pueblo saharaui es uno de esos colectivos cuya causa sería desconocida si no fuera por personas comprometidas con su historia, su sufrimiento y sus reivindicaciones. Todavía se puede disfrutar en Madrid de la exposición 'El Sáhara Olvidado', en la que a través de fotografías se invita al visitante a conocer la vida cotidiana de los saharauis. Esta muestra está acompañada de proyecciones de documentales para ofrecer una visión más amplia.

La periodista Serlinda Vigara ha sido una de las encargadas de organizar la exposición y fue una de las cooperantes repatriadas en enero de los campamentos saharauis ante la creciente tensión existente en la zona por el conflicto en Mali.

Reproducimos aquí la entrevista íntegra con la joven periodista:


- ¿Cuál es el objetivo de la exposición y de los documentales, como 'Mektub', que proyectáis?

El título de la exposición de fotografías 'El Sáhara Olvidado' da una pista sobre el objetivo, y es precisamente romper con ese olvido, que es una de las lacras del pueblo saharaui. Parece increíble que un territorio que ha sido provincia española hasta 1975 haya sido eliminado de la memoria colectiva. España vendió a Marruecos parte de su territorio (El Sáhara Occidental) de manera totalmente ilegal, y es por eso que nuestro país sigue teniendo una responsabilidad, tanto moral como legal, sobre esta zona. La zona fue invadida por el entonces rey Hassan II (padre del actual monarca alauí, Mohamed VI) en 1975, con la famosa 'Marcha Verde'. Fue entonces cuando empezó una guerra lenta cuyos coletazos sigue sufriendo el pueblo saharaui, dividido desde entonces en dos. Por una lado, los saharauis que se resisten en la zona ocupada y, por otro, los que tuvieron que huir al medio del desierto de Sáhara, a la zona más inhóspita, la 'hamada' argelina. Un desierto de piedra con temperaturas extremas y condiciones de vida lamentables.

La exposición y el documental se centran en estos últimos saharauis, los refugiados en el desierto desde la Marcha Verde. Y ahí siguen, esperando, resolución tras resolución de la ONU que les da la razón, que les legitima a elegir ser o no parte de Marruecos y volver a su patria (país, que las nuevas generaciones de saharauis no conocen). Tanto el documental como la exposición hacen un recorrido sobre la vida de un refugiado de una guerra y una situación lamentable. Porque la lucha del pueblo saharaui es de las más justas, ya que tienen todo el derecho internacional de su parte, y, aún así, siguen perseguidos, maltratados y refugiados.

- ¿Quiénes habéis sido los encargados de organizar la exposición?

Nos hemos encargado Joaquín Tornero y yo (Serlinda Vigara). Joaquín es fotógrafo profesional y yo soy periodista. Ambos solemos viajar a los campamentos de refugiados con diferentes proyectos, a ayudar todo lo que no sea posible. El documental es de María Hernández Herrer.

- ¿Crees que el pueblo español está concienciado de la situación del pueblo saharaui?

No y por eso es tan importante la realización de este tipo de eventos divulgativos. Como dice el documental, en los campamentos es el lugar “donde la cárcel no significa celdas infranqueables, si no infinito desierto”, y eso es contra lo que luchamos. Que su cárcel se conozca.

- ¿Qué imagen no se ha podido borrar de tu mente tras tu paso por el campamento de Ausserd?

Viajar a cualquier lugar en conflicto con condiciones más o menos duras deja a todo el mundo con momentos, imágenes y recuerdos que son imposibles de borrar y que te marcan de una manera muy poderosa. En mi caso, he ido varias veces ya a los campamentos, pero esta última fue la más dura, ya que debido a la Guerra en la frontera con Malí, los saharauis están sufriendo las amenazas de secuestros de Occidentales. Esta última vez todos los cooperantes fuimos repatriados por “motivos de seguridad”, y tuvimos que abandonar la zona cuando no habíamos cumplido todavía con los objetivos de nuestros proyectos de desarrollo. En mi caso, fui profesora de inglés en un colegio. Durante un ejercicio escribí en la pizarra. “Sahara is brown”, refiriéndome al desierto y a la arena, que es marrón. Un niño levantó la mano y me corrigió: “Yo creo que el Sáhara ocupado, el que no conozco, tiene que ser “blue”, por el mar que lo baña”.

- ¿Qué significa Mektub?

Mektub es una palabra árabe muy utilizada que significa “Está escrito”. Se refiere a una filosofía de vida muy particular, en la que el destino está ya decidido y todas las cosas que ocurren pasan por algo. Incluso las malas. Todo tiene sentido y todo ocurre por una razón poderosa que es la que mueve nuestras vidas, y la de los saharauis. Por ello todos confiamos que tanto los refugiados como los saharauis que resisten en la zona ocupada después de todos su pesares puedan ser libres. Ellos esperan que esa libertad del pueblo saharaui “esté escrita” (Mektub) a la espera de cumplirse.

jueves, 31 de enero de 2013

ACTUALIDAD. Donde dije digo...


31- Enero - 2013 (11:00 aprox.)

Hoy jueves 31 de enero aparece en el diario El País unos documentos que muestran pagos a distintos altos cargos políticos del Partido Popular (Arenas, Rajoy, Acebes, Cascos, Rato, Cospedal, etc.) entre 1990 y 2009, son datos de contabilidad interna que manejaba el ex-tesorero nacional Luis Bárcenas (imputado y “blanqueador” de dinero gracias a la Amnistía Fiscal de 2012). Unas semanas antes el diario El Mundo destapaba una posible trama de corrupción interna dentro del PP que afectaba a la cúpula nacional, se hablaba, y se habla, de sobres para pagos en sobresueldos con dinero público de forma ilícita. La respuesta oficial entonces del Gobierno fue: “no me consta”, “que cada palo aguante su vela” o “sí, hombre”, frases profundas y comprometidas que demuestran el interés por llegar hasta el final y tomar medidas para mejorar.
Escribo esto, y en este momento, porque quisiera dejarlo escrito antes de la comparecencia de prensa que dará Mª Dolores de Cospedal a las 12:00 de la mañana del día 31 de enero de 2013. Igualmente sólo quisiera adelantarme a sus palabras, las cuales desgraciadamente ya imagino. La pluriempleada y “pluriretribuida” Secretaria General nos deleitará con un alarde democrático de este estilo: “Estoy aquí para decir que respetamos la justicia y que por ello esta persona (Bárcenas) está siendo procesada y ya no forma parte de nuestro partido. Pero quisiera señalar que no toleraremos ningún tipo linchamiento político ni persecución. Nuestro partido está siendo perseguido y no dudaremos en tomar medidas judiciales contra aquellos que pretendan difamar (refiriéndose a los medios de comunicación)”. Tengo la sensación de que por ahí irán las “democráticas” respuestas de Cospedal en esa rueda de prensa, y dudo que en algún momento se haga autocrítica o se plantee la posibilidad de investigar y tomar severas medidas internas en el partido.

Volveremos al “balones fuera”, el “yo no sé nada”, el “tiempo dirá” y el “si te pasas, te amenazo”. Curiosa forma de entender la democracia tienen los partidos políticos en España, y en este caso también nuestro Gobierno. Después de 35 años de democracia siguen tratando a los ciudadanos como niños, sin abrirse a la realidad de una ciudadanía ya adulta que sabe lo que quiere, que conoce sus derechos y que está preparada para pensar por ella misma. Pero la estrategia está clara, mientras siga funcionando el “donde dije digo, digo Diego” sólo es cuestión de dejar pasar las tormentas.

Por cierto, mientras todo esto ocurre, ¿dónde está el Presidente Rajoy?, y ¿el juez que destapó esta trama de corrupción? ¡Viva España!

14:38 

Parece que nos hemos equivocado en algo, faltó decir que NEGARÍA todo. Los papeles no existen, están manipulados y es todo mentira. "Como usted ya sabe los papeles se pueden manipular y no demuestran nada", Cospedal en respuesta a la pregunta que hacía referencia a que Pío Escudero (Presidente del Senado) sí reconocía el pago a su nombre porque solicitó como un préstamo.

La negación absoluta no es más que el último recurso cuando la mentira se destapa... creer la negación de todo, incluso de la evidencia, es una cuestión de fe y elección de cada uno.

sábado, 19 de enero de 2013

¿Y POR QUÉ NO UNAS ELECCIONES?

"La democracia es el gobierno del pueblo, por el pueblo, para el pueblo" 
Abraham Lincoln


      A España se le ha llenado la boca de democracia durante 30 años. No hemos parado de hacer referencia a ese ejemplar sistema que parecía no tener fisuras. Ciudadanos, y políticos especialmente, se han encargado de citar tan intocable palabra para justificar durante mucho tiempo cualquier cuestión que pusiera en duda su funcionamiento. Todo este redoble de tambores alrededor del Santo Grial ha servido para aplacar cualquier temblor hasta que el castillo de arena ha empezado a derrumbarse por su propio peso (eso sí, empezando por abajo).

      De ese ideal cada vez queda menos, y cada vez son más los que opinan que sólo existe ya un elemento común que sostiene la democracia (a pesar de la Ley Electoral) que son las elecciones.
     
Congreso vacío, analogía del sentimiento ciudadano
    Quizá por primera vez en democracia, en España se está planteando una situación novedosa, de verdadero cambio y de pluralidad. Los dos grandes partidos del país, que se han repartido e intercambiado la tarta casi a su antojo, están en una merecida fase de desconfianza y descrédito ante la sociedad. Incapaces de reflexionar frente a tiempos que demandan valentía y cambio, su estrategia sigue siendo enrocarse en posiciones estáticas, dejando pasar una tormenta tras otra, sin plantearse una renovación interna y externa necesaria que dé respuestas adecuadas a la realidad existente. Sus acciones, o mejor dicho, sus no actuaciones siguen ahondando en perjuicio del país.

       Las últimas noticias de corrupción e inacción con casos como el de Bárcenas en el PP o el caso Pellerols en UDC, no son más que nuevas gotas que desbordan vasos colmados hace tiempo. 
         
     Llegada a esta situación, quedan dos opciones: seguir esperando a que nada pase y nada cambie, que el tiempo haga olvidar nuevamente el ruido; o lo que quizá es ya momento de hacer antes de perderlo todo, incluso la dignidad, y no es más que reclamar por todos los medios legales de los que dispone la sociedad lo único que todavía parece respetarse en Democracia: las elecciones.
     


Parafraseando a Machado, "hoy es siempre todavía", y todavía estamos a tiempo de cambiar.



sábado, 12 de enero de 2013

DEJAR HACER, LA TRAMPA DEMOCRÁTICA

"Lo más importante para la democracia es que no existan grandes fortunas en manos de pocos". 
Alexis de Tocqueville


                 Hace unos 10 años, en ese momento en que perdemos la inocencia de nuestros pensamientos, escribí un texto que rezaba algo así como “Democracia: dictadura del capitalismo”. Eran años donde empezaba a pensar por mí mismo, años de descubrimiento, como un niño que explora nuevos campos y que siente que esa creatividad le hace diferente. Ese texto señalaba, en resumen, cómo las democracias que podríamos llamar occidentales, esas democracias exportables porque suponían un ejemplo para cualquier otro tipo de régimen, no eran más que el timón perfecto para el verdadero capitán: el capitalismo. De alguna forma el capitalismo como sistema necesitaba de la democracia para funcionar, o mejor dicho, el capitalismo había encontrado su terreno más cómodo para moverse dentro de la democracia.
          
Thatcher y Reagan bailando
   Recientemente, viendo el programa Salvados sobre las energéticas (http://www.lasexta.com/videos/salvados/2012-noviembre-18-2012111600028.html) mi cabeza retrocedió hacia aquel pensamiento. No es que esta visión haya quedado en mí estancada a lo largo de los años, por supuesto que ha evolucionado, pero el programa sí hizo despertar un error que existía en esa idea original, estaba equivocado: el capitalismo teórico, en la práctica, no existe. Las democracias han caído en la trampa del capitalismo a lo largo de los años, principalmente a partir de 1970 cuando el boom keynesiano que controló la ambición liberal tras la primera gran crisis financiera de 1929 y tras la destrucción moral provocada por   la II Guerra Mundial, empezó a derrumbarse en favor de un “nuevo” orden dominado por el capital financiero y la desregularización. Fue el gran éxito del capitalismo, reflejado en las figuras políticas de Margaret Thatcher y Ronald Reagan, y que se ha impuesto casi sin altibajos de poder hasta nuestros días.
               
¿Quién manda?
                Desde mi punto de vista, el gran fracaso de las democracias reside ahí, en esa permisibilidad al laissez faire (dejar hacer) de los poderes económicos privados y principalmente al mercado financiero, que en contraposición al mercado productivo, no vende ni compra tangibles, es decir, cosas o servicios que tienen una utilidad real para las personas, sino que vende especulación de elementos intangibles e inexistentes. Esta desregulación del control político y estatal ha permitido literalmente la venta  de la política y los Estados (o supraestados como la UE) a los poderes económicos privados, y en ese sentido la desregularización de los mercados que vende el capitalismo es una falacia más,  lo único que ha cambiado es quién regulariza el mercado. Es en este punto donde la idea de un capitalismo que no tiene teoría se hace fuerte: el capitalismo no se basa en la liberalización de la economía, sino en el control de los flujos económicos a su favor (ya sean privados o públicos). Libertad para maximizar beneficios y libertad para minimizar pérdidas gracias al control y uso del dinero público. Si Adam Smith levantara la cabeza no podría entender la estrecha relación de necesidad que “su mano invisible” tiene con los poderes públicos estatales.
               
                Gracias a este remake de mis recuerdos, conecté con otro ideal de adolescencia que me repetía continuamente: “el comunismo tal como defiende la teoría nunca se ha plasmado en la práctica, y es por ello que nunca consiguió ser ese sistema soñado, simplemente fue culpa de los que no lo supieron cristalizar en la realidad”. Cuando rememoro aquello me río de mi todavía inocencia por aquel entonces, aceptando que sólo se trataba de una creencia falsa, un engaño mental; el mismo que dice que el capitalismo teórico existe, o que las democracias son ese sueño que pretenden hacernos creer.


martes, 8 de enero de 2013

HASTA SIEMPRE 'COMANDANTE' MENESES

 Sierra Maestra, 1958. Por Enrique Meneses

"Aquí se queda la clara, la entrañable transparencia, de tu querida presencia Comandante..." Sí, la canción de Carlos Puebla continua con el nombre del revolucionario "Che Guevara". Una letra que fue escrita para despedir a uno de los argentinos más conocidos del mundo, cuando decidió abandonar Cuba para dirigirse al Congo a emprender una nueva aventura. Hoy, el mensaje que lanza parte de la letra del cantautor cubano bien podría servir para despedir a otro soñador, esta vez del fotoperiodismo.

Enrique Meneses dejó el mundo que le entusiasmó recorrer el pasado 6 de enero. Su marcha ha ensombrecido un periodismo desorientado, en plena transformación y que vive una de sus épocas más tenebrosas. Una despedida que quizás sirva para "resucitar el nombre de uno de los periodistas esenciales de nuestra historia", como explicaba su amigo Gervasio Sánchez en 'The Telegraph'.

Su relación con la Revolución Cubana va más allá de un simple paralelismo con la figura del Che Guevara. Fue el único periodista extranjero que estuvo en Sierra Maestra antes que se tomara La Habana. Él estuvo allí, en el momento y en el lugar oportuno, cuando todo se estaba fraguando. Las imágenes de Fidel Castro casi en plena oscuridad, el quehacer cotidiano de los revolucionarios y su propio retrato con los hermanos Castro pasarán a la historia. Igual que lo harán sus lecciones magistrales en su propia casa o el legado que deja en sus libros.

Nunca fue una voz secuestrada, ni un objetivo tapado... Sorteó la censura con gran habilidad y nunca creyó en los contratos fijos de los grandes medios. Vivió y murió como freelance. Meneses encarna el mejor periodismo, aquel de yo me lo guiso y yo me lo como, aquel de cumplir sueños propios y dar voz a los que no pueden expresarse con libertad... Aquel periodismo que se ha perdido... Un pesimismo que él nunca encarnó, ni encarnará.

Cuando los medios, sobre todo los tradicionales como la prensa, parecen estar en vías de extinción, el mejor consejo que se puede seguir es el que dejó en su televisión 'Utopía': "Los jóvenes que hay en España en este momento, acuciados por dificultades miles, están equivocando el camino. Ellos creen que primero necesitan dinero para hacer cosas y yo digo que primero necesitan ideas de cosas para luego hacer dinero". Como él decía: "Pensar en Utopía".



Imagen de su página web:  http://www.enriquemeneses.com/